El Tribunal de Justicia de São Paulo, en Brasil, autorizó este mes a los integrantes de la ONG Cultivate – Cannabis and Health Association plantar cannabis y producir medicinas extraídas de las plantas. Es un Hábeas corpus colectivo sin precedentes, que protege a 21 pacientes de ser detenidos o de que sus plantas y equipos sean incautados por la Policía Civil y Militar. Brasil supera así el umbral de cientos de autorizaciones judiciales excepcionales para el autocultivo con fines medicinales.
Artículo publicado originalmente en la revista Cannabis y Salud, por Marcus L. Bruno, periodista y colaborador de Cannareporter en Brasil
Cultive fue fundada por Cidinha y Fabio Carvalho de São Paulo. Descubrieron en 2013 que el cannabis podía aliviar los síntomas del síndrome de Dravet de su hija Clárian, una enfermedad que provoca ataques epilépticos y retraso en el desarrollo psicomotor. En 2016, la familia ganó un Hábeas corpus plantar y producir medicamentos para la niña. Desde entonces, Cidinha se ha convertido en una activista del cannabis medicinal, con fuerte presencia en Brasilia. A lo largo de los años, Cultive ha promovido varios cursos de cultivo para sus pacientes, mientras luchaba en los tribunales por el derecho ganado la semana pasada.
Cultive fue fundada por Cidinha y Fabio Carvalho, quienes encontraron en el cannabis una alternativa terapéutica para su hija Clárian, que padece el síndrome de Dravet.
“La asociación está autorizada para sembrar y cultivar la planta única y exclusivamente en la cantidad de 224 plantas de cannabis en cada período de floración, que dura entre cinco o seis meses, lo que representa 448 plantas por año, y de acuerdo con los parámetros establecidos en el medical prescripción”, resolvió la jueza Adriana Barrea, del Foro Penal de Barra Funda, en la capital.
El magistrado también fijó un plazo de 6 meses para que la asociación presente un informe médico que contenga una indicación de la necesidad de continuar los tratamientos para cada uno de los asociados. Será necesario para que la ONG obtenga la renovación del salvoconducto.
Esta es la tercera asociación de pacientes autorizada para cultivar Cannabis con fines medicinales en Brasil. El primero fue Abrace, de Paraíba, en 2017. El año pasado, Apepi, de RJ, también fue autorizado, pero la medida cautelar fue revocada. Sin embargo, la decisión de Cultive no tiene precedentes porque se encuentra en el ámbito penal y no civil, como las anteriores.
“Es el primer caso de acción penal. Dado que las decisiones permiten muchos recursos, preferimos utilizar la acción más obvia, ya que lamentablemente la ley criminaliza a quienes cultivan sin importar el propósito. Tuvimos que usar el derecho penal para decir que esto no es un delito. Incluso el fiscal (Fiscalía), una de las razones en contra de la orden fue que no sería la actuación adecuada. ¡Y respondimos que ya no será la acción adecuada cuando esta actividad ya no sea un delito!”, explicó a Cannabis & Saúde el abogado Ricardo Nemer, uno de los fundadores de Rede Reforma y quien firma la solicitud de habeas corpus.
La dignidad está por encima de la prohibición, dice el juez
“Por medio de esta petición, buscamos implementar el principio de la dignidad humana, así como los derechos a la vida y a la salud, que deben prevalecer sobre la prohibición de cultivar la planta de la que procede la sustancia utilizada específicamente para el tratamiento de pacientes, en un contexto de necesidad, adecuación y proporcionalidad”, escribió el juez en la sentencia.
“La legislación que garantice y regule el derecho a la salud debe estar siempre atenta a acompañar los avances de la ciencia y la medicina, actualizándose y facilitando que los ciudadanos puedan gozar plenamente de su derecho a la salud”, argumentó Adriana Barrea.
Policías Civiles y Militares protestaron contra autorización
En el proceso, la Policía Civil de SP destacó la “dificultad en la delimitación de parámetros para la autorización”, así como en cuanto a la supervisión de cultivos, “más en el caso del caso, con varias personas involucradas”.
“Una vez sembradas las primeras semillas, nada impide que las plantas se desarrollen y multipliquen, y la plantación toma proporciones mucho mayores a las esperadas”, destacó el PC.
La autoridad defendió “que no es posible desconocer desviaciones dolosas, culposas o incluso no intencionales, como en el caso de hurto o hurto de sustancias por parte de terceros”
La Policía Militar, así como el Ministerio Público, argumentaron que la forma de hábeas corpus “Exige la prueba de prueba y el abuso de poder alegado, que no se percibe en el caso”, lo que, para el PM, “provoca inadecuación del camino elegido”.