Ferraz Pharma estudia soluciones innovadoras para facilitar el uso de productos a base de cannabis y apuesta por fórmulas de uso veterinario, a la espera de que la Unión Europea regule el CBD como nuevo alimento.
Ferraz Pharma, que forma parte del Grupo Ferraz, quiere ser una referencia en el mundo del cannabis en Portugal. La empresa familiar, que opera en la industria farmacéutica y nutracéutica (nutrición con fines terapéuticos) desde 1981, tiene como objetivo transformar la forma en que se usa el cannabis, con soluciones "vanguardistas" e "innovadoras", centrándose en productos de CBD y nuevos formulaciones para la terapéutica, no sólo para uso humano sino también para animales.
La compañía dice que es la única empresa portuguesa involucrada en el proceso actual de aprobación del expediente para el uso de CBD como "nuevo alimento" comercializado, y espera tener una respuesta de la UE a principios de este año.
La licencia Infarmed llegó en mayo del año pasado
La nueva unidad de producción, ubicada cerca de la sede del grupo, en Santa Comba Dão, recibió la licencia Infarmed para Investigación y Desarrollo de productos a base de cannabis en mayo pasado y ahora está operativa. La compañía produce medicamentos a base de cannabis y ahora está estudiando varias fórmulas, también con THC, y probando diferentes soluciones, como cápsulas, aceites de agradable sabor, comestibles o un aplicador nasal, que facilitarán la vida de los usuarios. Esto se basa en “dos variables importantes: un efecto más rápido y una mayor duración”, explica Pedro Ferraz, miembro de la junta directiva del grupo. “La opción de dar la flor al consumidor para que la cocine al vapor o la fume no tiene sentido y el uso de gotas, a pesar de ser una de las formas más rápidas de absorberse, no es la más cómoda ni práctica”, enfatiza. “El núcleo de la marca es el uso de CBD”full spectrum”, subraya, “porque es mucho más eficaz que los aislados de cannabis”.
En una primera fase, la unidad se dedicará a desarrollar fórmulas para la salud animal y, posteriormente, se dedicará a productos para uso humano, centrándose en la cosmética, únicos productos en los que, por ahora, se puede utilizar CBD. La estrategia de la empresa es fabricar sus propios extractos, utilizando proveedores portugueses y extranjeros para adquirir la materia prima.
Los problemas del cáñamo retrasan los procesos
Pedro Ferraz, gerente de la empresa, dice que en este asunto, sin embargo, enfrentaron las mayores dificultades. Si el proceso de licencia de laboratorio por parte de Infarmed fue relativamente fácil y rápido, no todo fue un camino de rosas. Los procesos aún son largos y la burocracia es inmensa, especialmente en lo que respecta al cáñamo. Portugal fue uno de los primeros países en despenalizar las drogas, incluso en cuanto a la regulación del cannabis para uso médico, pero ahora, y especialmente en relación con el cáñamo, “debido a la falta de experiencia en este ámbito y a los problemas que están planteando las autoridades, se vuelve si muy castrante. Es difícil invertir en esta área, llegando al punto de poder hacer inviable todo el proceso”, lamenta.
Para el emprendedor, “si queremos estar a la vanguardia, no podemos perder más tiempo”. El interés por la planta es intrínseco a la filosofía de la empresa. “La génesis del grupo siempre ha estado ligada a la naturaleza: las plantas siempre han brindado a la humanidad soluciones médicas, con muchos beneficios asociados”. Y las ventajas del cannabis, en este sentido, parecen indiscutibles. "Hemos visto la aplicación en pacientes con cáncer con resultados increíbles”, dice. Pero para Ferraz Pharma, los animales también pueden beneficiarse enormemente del uso de CBD. “Tenemos casos de animales con problemas de ansiedad o Parkinson en los que la aplicación de CBD tiene un efecto casi milagroso”, concluye.
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Artículo publicado originalmente en el #2 de Revista Cannadouro