Humberto Nogueira, empresario, consultor de cáñamo industrial y vicepresidente de ACCIP – Asociación Portuguesa de Comerciantes de Cáñamo, dice que la Ordenanza No. de toda la planta de cáñamo y advierte que las nuevas reglas podrían dejar fuera a miles de pequeños agricultores, que podrían invertir en cáñamo en Portugal. A continuación, el vicepresidente de la ACCIP comenta punto por punto el nuevo artículo 14-A.
«Artículo 3-A
Requisitos técnicos aplicables al cultivo de la planta de cannabis con fines industriales
1 – El cultivo de la planta de cannabis con fines industriales (cáñamo industrial) deberá realizarse en condiciones agronómicas adecuadas a estos fines, y de conformidad con lo dispuesto en los párrafos siguientes:
a) Sólo podrá realizarse al aire libre, mediante siembra, no estando permitido trasplantar plantas, y ninguna etapa de desarrollo vegetal podrá ocurrir en invernaderos, refugios o estructuras similares;
“No proporciona la base legal para interferir con los procedimientos y métodos agronómicos de propagación del cáñamo industrial, ya que se trata de un cultivo agrícola certificado y subvencionado en la Unión Europea (UE), y no un cultivo excepcional, como es el caso del cannabis para fines medicinales. . Asimismo, tampoco justifica qué sanciones se aplican en caso de incumplimiento”.
b) La superficie mínima permitida, en la suma de las parcelas de una determinada explotación agrícola, es de 0,5 ha;
“Legalmente, el área mínima para registrar una parcela en la IFAP es de 100 m², lo que hace que el requisito de un área mínima de 5000 m² para obtener la autorización de cultivo de cáñamo industrial sea un factor limitante para miles de pequeños agricultores en Portugal. Asimismo, no justifica qué sanciones se aplican en caso de incumplimiento”.
c) La densidad de siembra deberá ser la adecuada al fin previsto, y no podrá ser inferior a 30 kg de semilla por hectárea.
“Interfiere con los objetivos profesionales de cada productor, sabiendo que en la mayoría de los productores europeos de semillas de cáñamo para siembra, la bolsa de semillas se vende en unidades de 25 kg cada una, o 20 kg en el caso de algunas variedades italianas. Nuevamente, no fundamenta la base legal para interferir con los procedimientos agronómicos y los métodos de propagación del cáñamo industrial utilizado por los productores, que es un cultivo agrícola certificado y subvencionado en la UE”.
2 – No está permitido transportar las sumidades floridas, contengan o no la semilla, fuera de la finca.
“Probablemente sea el punto que genera más preguntas y temores entre los involucrados en la industria portuguesa del cáñamo. No existe una base legal para limitar el comercio de toda la planta de cáñamo, especialmente dado que en Portugal no existe una infraestructura industrial para procesar toneladas de biomasa resultantes de un mínimo de 5000 m² de cultivo de cáñamo. Al mismo tiempo, limita la rentabilidad de las empresas productoras y de los agricultores, lo que se refleja en menos mano de obra contratada y menos empleo fijo y estacional”.
3 – Los paquetes de semillas abiertos que contengan semillas sobrantes no utilizadas en la siembra en la campaña agrícola para la cual fueron adquiridos, no podrán ser utilizados en el año siguiente, debiendo el agricultor conservar documentación que acredite el destino dado a los sobrantes.
“Promueve el desperdicio de semillas, combinado con la imposición de una superficie mínima de 5000m² de cultivo y una cantidad mínima de 30kg de semilla por hectárea”.
4 – Los paquetes de semillas que hayan sido adquiridos y asociados a solicitudes de autorización rechazadas deberán conservarse con su sello original y sólo podrán tener los siguientes destinos:
a) Si el rechazo no fue por causas asociadas a los bultos, el solicitante podrá quedarse con los bultos, siempre que se conserven con su cierre original, y podrán presentarse en otro proceso de solicitud de autorización;
b) Si el rechazo es por causas asociadas al envase, pueden ser devueltos a su origen, o destruidos, o enviados para consumo animal o humano, en caso de que no estén tratados con productos fitosanitarios, debiendo el agricultor conservar, al menos menos durante tres años, prueba documental del destino dado.”
“No permite al agricultor cultivar semilla para siembra por el riesgo de contaminación por bolsa perforada, pero autoriza su procesamiento directo para alimentación humana y animal. En general, hay una clara intención en la nueva ordenanza de eliminar por completo las posibilidades de que los productores obtengan rentabilidad de la flor de cáñamo, independientemente de la finalidad que el comprador de la cosecha le dé al producto”.
[…] Humberto Nogueira: "No hay base legal para limitar el comercio de toda la planta de cáñamo" […]